06 de Marzo
1544.- Pedro, hno. de Sta. Teresa de Jesús renuncia a la herencia a favor de su hermana María de Cepeda, para ir a las Indias. Es el único hermano de Sta. Teresa que salió para Centroamérica. Más tarde va a Pasto, junto a su hno. Hernando. En 1554 a Quito para reunirse con sus hermanos Lorenzo y Jerónimo, con quienes emprendión el regreso a España. Llevó a Nicaragua una imagen de la Inmaculada que Sta. Teresa regaló al Nuevo Mundo. Juan de Castellanos le canta en “las alegías de varones ilustres” en la conquista de la Florida: “A la misma conquista vino Soto/ Capitán del Pirú muy valiente” etc. Y concluye; “Un caballero Pedro de Ahumada/ mas Ahumada fue, que no dio humo” (Virg., Conqu. P. Sev. Sta. Teresa.ocd.)
1581.- Continúa el Cap. de Alcalá de Henares para la separación de los ocd. de los calzados. Se dan las Constituciones para frailes y monjas. El Col. de Alcalá, que llevaba el nombre de Ntra. Sra. Del Carmen cambió el nombre por el de S. Cirilo, por su clausura el día de S. Cirilo, entonces Carmelita. Entre los acuerdos: “celebrar ciertas misas por S. M. el Rey, que tanto había favorecido a la Reforma Teresiana y ofrecer una de las 3 disciplinas por el Rey, recitando una oración por su salud”. El Capítulo dio cuenta al Rey de la erección de la Provincia ocd. aparte, de la elección del P. Gracián para primer Provincial. Firman la comunicación los PP. Gracián, Doria, Juan de la Cruz y Gabriel de la Asunción y como secretario Fr. Mariano de S. Benito (Doc. Prom. P. Juan L. Astil.ocd)
1596.- Breve “Apostolicae Sedis Benignitas” de revocación de la sentencia de expulsión del P. Gracián y readmisión entre los ocd: “Cuando se envió el Breve a España, a los que entonces gobernaban, dice Gracián, que eren hechura de los que dieron la sentencia de expulsión, no lo considero obedecer y hubo ciertas revueltas por este motivo. Al fin, del parecer del Papa Clemente VIII y otros graves personajes, se tomó la resolución de que tomase el hábito de los calzados, entre quienes le recibió el Vicario General P. Enrique Silvio, con patentes del 6 abril 1586. Me envió al Convento de Martín in Nontibus, mandando me diesen la celda del General. Poco estuve en ella, porque me mandaron ir a la casa del Card. Deza, con oficio de su teólogo, predicando en Roma y acudiendo a negocios muy graves y honrosos de la Inquisición y de cosas gravísimas, porque el Cardenal, mi patrón, era de los más antíguos de la Congregación del Sto. Oficio y Protector de España” (Cartas del P. Gracián. P. Juan L. Astil. ocd.)
1602.- Víspera de ir a California los ocd. de México, escribe el cronista Fr. Antonio de la Ascensión ocd: “Juntos todos los expedicionarios en el Palacio del Virrey oyeron una elegante plática, que les hizo, en orden al cumplimiento de la obligación de cada uno y que entonces acertarían en ella, cuando se sujetasen al parecer y diligencia de tan santos y doctos religiosos, en quienes consistía la fortuna del buen suceso, que era costear a precio de sustos y trabajos. Los padres ocd. mandaron que todos confesasen y recibiesen la Eucaristía, a la que siguió un ardiente y fervoroso sermón, cuyas voces fueron vivas y purísimas llamas que encendieron en valor y osadía aquella católica tropa. Vistiéronles a todos el escapulario de Ntra. Sra. del Carmen, a cuyo nombre se consagró la tropa y enarboláronse dos banderas, una con las armas de España y otra con las de la Religión. El Sr Arz. Delegó toda facultad a los misioneros ocd. en aquellas nuevas regiones. Los obreros apostólicos se prepararon con oración y ayuno. Ofreciéronse pelear en ella varonilmente, hasta derramar la última gota de su sangre, por la gloria de su santo nombre. Escogieron entre los indios convertidos un negrito, que ellos habían catequizado: su cuerpo un montón de tizne: su alma un campo de nieve. Tomaron a este fiel y virtuoso negro por intérprete y nuncio para los otros indios” (Sta. Teresa por las misiones. P. Sev. De Sta. Teresa).
1929.- A petición del Gobernador de Antioquia, Marceliano Vélez Mons. José Joaquín Artaga, Pref. Apost. Pronuncia un célebre discurso sobre la urgencia de la carretera de Medellín hasta el mar; “Debéis construir, cuanto antes, esa carretera que nos una con el Golfo de Urabá. Si no lo hacéis vosotros, lo hará la vergüenza nacional” El Maestro Valencia al escuchar exclamó: “Le oí una vez ese verbo fulgurante, a ese gigante de la palabra”. Discurso pronuncia do ante la Asamblea de Diputados y ante más de 20 mil personas. (Hist. Colombia. P. Bern. Rest. ocd)
“De ninguna cosa hacer burla” (Teresa de Jesús)
Fuente: Miguel Angel Lecumberri, Efemérides Carmelitanas Enero-Abril Tomo I. Santiago de Chile 1996. Transcripción, arreglo fotográfico, recopilación y actualización: Iván Mora Pernía, ocd. (IDJMP)
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